1. Cuando no permitimos que nuestros hijos, hermanos, amigos, o cualquier persona que nos importa tenga la oportunidad de pensar cómo solucionar los problemas que se le presentan y en lugar de eso les solucionamos rápidamente sus dificultades, estamos haciéndoles un mal porque les estamos enviando el mensaje de que no tienen que preocuparse por nada puesto que la resolución de sus problemas está a cargo de otras personas externas a ellos mismos, estamos logrando que crean que no deben hacerse responsables de sus actos y las consecuencias de los mismos y en un futuro no podrán salir adelante sin aquellas personas que siempre estuvieron allí para solucionar sus problemas. Entonces estamos creando personas dependientes totalmente de otros, y los estamos orillando a permanecer ajenos a la realidad evitándoles pensar y sentirse útiles, independientes y autosuficientes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario